Paisaje imaginario

He buscado transmitir diversas sensaciones, pero sobre todo calidez ya que es una playa,  empleando tonalidades en las que predomina el naranja. Pero además tranquilidad de la noche, soledad, y calma. Para mí es muy importante, y de echo le he dado importancia al barco, la que para mí representa libertad, dejar a un lado el pasado, y escapar de los problemas que están en tierra firme.

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Comencé poniendo una base de film, ya que es una balda de mi habitación y no quería mancharla demasiado. debajo de ésta, puse un tupperware para que hubiese una elevación ya que el paisaje del fondo es montañoso. Eché café para cubrir todo el fondo, y para degradar, fui mezclando los cereales de maíz que previamente machaqué en un mortero, de este modo el cambio de elementos no sería tan brusco. Ahí está el paso de la montaña a la playa. Encima del café coloqué patatas peladas y partidas a la mitad, a las que en la cima con ayuda de mayonesa, puse orégano para crear vegetación. Más tarde, y sobre la marcha puse orégano en el resto de café, ya que me gustaba la mezcla de esos colores. Creé un mar de sardinas con espuma de sal, y sobre el cual flota un mar de zanahoria con mástil y vela de espaguetis y lechuga. Finalmente, para darle un toque curioso, un sol/luna de naranja.

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En cuanto a las luces en las fotografías, las he tomado a diferentes horas, con luz tanto natural como artificial, e incluso en ocasiones, de colores.